viernes, 6 de abril de 2007

La Vida Luego del Divorcio a los 23 Años

Parte: I - Piloto

Y muchas partes más estaremos disfrutando luego de este piloto. En un principio luego de esta corta pero muy significante separación en mi vida, todo toma color nuevamente después de tanta niebla y oscuridad. Una oscuridad la cual siempre viví durante mí tiempo como conjugue, lo que pasaba era que estaba enamorado, y cuando uno esta enamorado todo es color de rosa. Ahora que estoy separado y soltero, veo las cosas de una manera diferente, no se si se le llama madures o falta de confianza. La situación es que luego casi de 3 años de la separación fue que encontré la tranquilidad, una tranquilidad que me atemoriza demasiado, que me agrada y no la quiero perder por nada del mundo. La gente dice que lo peor del mundo es llegar a la vejes solo. Yo, al momento no le temo a esto, a lo que si le temo es a no crear mi propia generación, a no tener hijos a los cuales el día de navidad ver jugar. Recuerdo con una claridad enorme el día en que madre, mi hermosa madre me dijo: “Tienes que tener cuidado con lo que estas haciendo con esa persona, acuérdate que cuando uno esta enamorado, es como estar en un globo que lo único que vez son nubes blancas, la verdad lo que negras y te engañan.” En aquel momento debí haberla escuchado, pero como estaba el en globo que ella misma me dijo, no escuche y lo que se vino a la mente era la idea que mi madre no quería que yo fuese feliz. Hoy me acuerdo en lo que pensé y me pregunto cuan ignorante era para aquel tiempo, cuan enserado estaba en aquel globo de nubes blancas, cuan ciego estaba que cuando me aconsejaron, en lo que pensaba era en que la gente me tenia envidia, en que no querían que yo formalizara una familia. La verdad era que ellos, y cuando digo ellos incluyo a la familia de parte de ella, veían todo lo que estaba pasando, veían la realidad y sabían mejor que yo que esa relación no me convenía, pero como dicen “nadie aprende por cabeza ajena.”

Yo aprendí, pero fue a fuerza de cantazos, cantazos que hoy no me permiten confiar en nadie. Cada ves que le hablo sobre esto con personas conocidas todas me dicen lo mismo, y creo que las he escuchado todas: “no te preocupes, ya aparecerá alguien para ti”, “el Señor te tiene alguien guardado para ti”, “en algún lado se esta tu alma gemela y estas por encontrártela”, y me atrevo apostar que ustedes al leer esto estarán pensando en lo mismo, “pobre, algún día encontrara a alguien”. La verdad es que esto no me hace sentir mejor, nadie sabe los planes del Señor, nadie sabe lo que le presenta el futuro, tú puedes quizás tratar de que todo salga de bien, pero no sabes y perdonen si les sueno morbo, si el día de mañana te vas a levantar de la cama. Todo esto que les cuento y lo que me falta por contar son experiencias por las cuales he pasado. No es que deseo que me tomen pena, o que me quiero cantar como la victima, es que quiero que conozcan el camino por el cual he pasado para lograr la tranquilidad en la cual vivo en este momento, que por cierto no ha sido fácil.

Empiezo contándoles las cosas por la que pase desde el día en que volví a vivir con padres. Lo primero que te dicen y no solo tus padres, todos los que te conocen “tu vas a volver con ella” y esto viene a que no es la primera ves que te vas de tu casa y pasas la noche con tus padres, durante el matrimonio, ya de antemano has tenido problemas y en varias ocasiones te ya te has ido y luego regresas. La gente pierde la confianza en ti, lo primero que dices es “yo no voy a volver con ella, ya no la quiero”, y luego de un par de días estas de nuevo con ella como si nada hubiese pasado. Los peores que se sienten son estas personas que una vez te consolaron, y que te vieron llorar como un niño, te aconsejaron que no volvieras con ella y luego los ven juntos y no encuentran en donde meter la cara. Continuara.

10 comentarios:

Wilma Jimenez dijo...

Felix

La Vida Luego del Divorcio a los 23 años

Como bien tú dices el matrimonio no es para todo el mundo. Hay que tener una madures, capacidad inmensa para poder mantener un matrimonio estable hoy DIA. Hay personas que se casan jóvenes y verdaderamente es para el fracaso en sus vidas. Conozco personas mayores de muchos años de casados y llegan al divorcio. Por muchas razones, nunca se entendieron se educaron, se prepararon, nunca asistieron a un taller matrimonial. Hoy DIA hay tantas parejas disfuncionales que la estadística es muy grande en nuestro Puerto Rico.

Lamentablemente son muchas las parejas que contraen matrimonios sin estar preparados, emocionalmente, físicamente, económicamente, etc. Por más que los padres los educan los exhortan, que estudien que se preparen que la vida no es color de rosa, que hay situaciones donde verdaderamente se necesita tener a dios en el Corazón y la paz para soportar muchas cosas en común.

La iglesia Católica nos educa que el matrimonio es para toda la vida, que el matrimonio no se debe de romper por ningún motivo a menos que sea por adulterio. Muchas parejas tienen que recurrir al divorcio porque no les queda otra alternativa en sus vidas. Pero créame que debe de ser bien difícil cuando se tiene hijos en ese matrimonio. Cuando ya los hijos tienen uso de razón. Para mi el matrimonio debe de ser para toda la vida, porque si estamos cambiando por cambiar no va en nuestros principios cristianos.

Muchos seres humanos viven marcados en su niñez por un divorcio no todos los divorcios son por la misma razón, hay diferentes situaciones. Jamás en la vida lo pueden superar quedan marcados para siempre. Hay muchos sicólogos, expertos en la materia que ayudan a superar estos traumas en la vida de cada ser humano.

A veces en nuestra comunidad, lugar de trabajo vemos como personas adultas están pasando por esta situación difícil. Muchos toman medicamentos, antidepresivos para la depresión que le causo este mal rato en sus vidas. Cuando veo a un niño que esta pasando por una situación parecida lo triste que casi siempre están porque no lo entienden, en ese momento dado de sus vidas.

Buenas Noches

Wilma Jiménez

Andrés Rodríguez dijo...

Saludos Félix:
Como tú eres un “fiebrú” de las películas, tu vida parece eso mismo, una película de la vida real. Puedes comenzar ese guión que tanto deseas escribir. Todos los que estamos casados pasamos por situaciones embarazosas en el matrimonio. Es que somos personas con caracteres diferentes y a veces no nos ponemos de acuerdo ante alguna situación. Dices que ya a los veintitrés años estabas divorciado, pienso que te casaste muy joven. El consejo que yo les doy a todos los jóvenes de hoy día es que disfruten todas las etapas de su vida, que la misma no termina a los veintiocho o a los treinta años. Ya en esta etapa la persona ha alcanzado la madurez necesaria para compartir su vida con otra persona. Además, ha tenido la oportunidad de compartir con diferentes mujeres y puede tener una idea más clara de cuál es la que le conviene. Aunque esto no es carta de garantía para que esta relación vaya a ser un éxito. Muchas veces escuchamos decir que el noviazgo es para que los enamorados se conozcan bien, pero la realidad es que éstos se llegan a conocer después del matrimonio. Los novios ven todo color de rosa, sí surgen algunas situaciones un poco difíciles, pero con par de palabras y par de besitos se solucionan. En el matrimonio sí que surgen situaciones que si no estás preparado emocionalmente puedes fracasar. Más hoy día con lo difícil que está la vida en Puerto Rico. Algunas situaciones que pueden surgir son: problemas económicos, problemas de vivienda, mujeres celosas, que por todo te forman una pelea. Todas estas cosas tenemos que pensarlas bien antes del matrimonio. Recuerda que el matrimonio es un juramento que hacemos ante Dios y si no estamos preparados no lo podremos cumplir. Otro elemento, regresar a vivir con los padres después de un divorcio y sabiendo que ellos aconsejaban a uno de que la relación no era conveniente, no es fácil. Tiene uno que bajar la cabeza y aceptar los comentarios que hacen, pero los padres son los padres y no te van a fallar a pesar de que te lo habían advertido. Félix, sigue adelante, todavía eres joven y como dije anteriormente, la vida no termina a los treinta años.

Guirmar dijo...

Los seres humanos nos equivocamos en muchas ocasiones y no nos damos cuenta. Sino cuando nos pasan los problemas o nos damos un catanzo fuerte. Con tu historia veo que te casaste muy joven y enamorado. No dices los motivos de la separación pero si con tus palabras fue tormentosa y muy dolorosa.

En verdad te casaste muy enamorado, Yo al casarme sabia que no era para toda la vida, tenia conocimiento que algún día se iba a terminar. Pero el destino me llevo a casarme debido a que quede embarazada.

Yo pensaba que lo amaba y ahora compruebo que no. Lo que sentia no era amor, sino costumbre o un sentimiento pero amor verdadero no.

Siempre vivia con miedo al fin de la relación. Cuando llego me dolio pero ahora compruebo y certifico que fue lo mejor que me pudo a ver pasado. Ejemplo no hubiera tenido la oportunidad de conocer más del Dios, no hubiera podido estudiar mi maestría y son muchas cosas las que hago y disfruto ahora que antes no las podia hacer.

Lo de uno llega y Dios lo tiene destinado. Así que disfruta la vida y lucha por ser feliz con ese ser que va a estar a tu lado.

Guirmar

Doris Vilma Rodríguez dijo...

Felix, si te complace saber que no eres el único que ha pasado por una situación así, pues créeme que la pasé a la edad de 21 años. No la supere tan pronto como tú, llegue a estar hospitalizada por la depresión en la que me sumergí. Mi historia amorosa y trágica comenzó en el otoño de 1988, cuando apenas tenía 15 años. Joven al fin me enamoré de un joven de 18 años, mantuvimos una noviazgo hasta el 1994, cuando finalmente nos casamos. Durante el noviazgo nos separamos en varias ocasiones, pero siempre terminábamos nuevamente juntos. Los primeros tres meses de matrimonio fueron fabulosos, pero luego la pesadilla comenzó. Él había comenzado a cambiar, se transformaba en una persona totalmente desconocida para mí. Siempre he sido de las mujeres que no tapan el cielo con la mano y comencé a comprender que algo pasaba y que era en su trabajo, así que empecé a ponerme en vela. Él era gerencial de un supermercado y cada vez que yo llegaba se encontraba dialogando con la misma empleada. Los celos comenzaron a apoderarse de mí y comencé a reclamarle, naturalmente él lo negaba todo.

La situación cada vez era más insoportable en la casa y el me pidió que me fuera de vacaciones a casa de mis tíos. Pensé que era una buena oportunidad para que el reflexionara y accedí. Tan pronto llegué a San Juan a casa de mis tíos, el sacó sus pertenencias de la casa y se fue a vivir con sus padres. Imagínate lo terrible que me sentía y en plenas fiestas navideñas. Comencé a adelgazar rápidamente y en menos de tres semanas había perdido 30 libras. Mi ropa era doble 0 y pesaba 90 libras, lo que me llevó al hospital por una colitis. Para hacerte el cuento largo corto, al cabo de 6 meses nos divorciamos e irónicamente el llegó llorando, yo trate de controlarme con una vistaril pero luego me desplomé. El proceso del divorcio es bien difícil y eso que no teníamos hijos. Como tú, yo tenía mucho miedo a enamorarme nuevamente y sobre todo a pasar por el proceso del divorcio otra vez. Pero mi historia cambio y me encuentro felizmente casada.

yolanda dijo...

Félix, a la verdad que tienes unas ocurrencias, eres un loco de la vida, muy agradable por cierto y ¿sabes qué? Vas por buen camino, te estás desahogando, parte de las cosas que permanecen como heridas por cerrar. Todos tenemos un libro por comenzar, el mío trata sobre el maltrato al que fui sometida por mi padre en mi niñez y juventud. Aún las cicatrices atormentan y no sé si como tú, tenga el valor algún día de hablar sobre ello. El caso es que si más adelante me atrevo darte algún consejo es porque he pasado por la experiencia y me ha dado resultado.

El divorcio es como la muerte de algún ser querido. La separación se vive por etapas, dependiendo de cuánto daño te haya hecho, es el tiempo que tardará en sanar tus heridas. Me refiero al divorcio por lo que hablan las personas que lo han experimentado, en lo personal he vivido la separación de mis padres y mi esposo y yo, por espacio de tres meses, también la muerte de mi padre, mi abuela querida y dos primos que adoraba. Definitivamente se requiere madurez para dar el paso del matrimonio y al menos sobre un año o más de noviazgo, pero más importante aún, el amor de Jesucristo deberá estar presente en ese hogar. Visitar la iglesia, vivir una vida juiciosa, del agrado de Dios. Llevo 17 años de casada, he pasado el Niágara en bicicleta, y aún amo a mi esposo y hasta hoy recibo de él correspondencia a este amor. Soy católica y durante un año estuve en cursillo pre matrimonial y créeme cuando te digo que ayudan mucho.

La búsqueda de pareja no es fácil y tampoco hay garantías de cómo saber si esa persona te aprecia por lo que eres o si quiere sacarte los verdes. Sólo recuerda que en el amor no hay interés, sí se desea el bienestar de la otra persona, trata de encontrar al menos esto y que sea recíproco. De manera que en lo personal si deseas una mujer buena, en un pub, no la vas a encontrar, esas lo que buscan es lo fácil, divertirse y cero compromisos. No te apresures, vive la vida primero, busca realmente sostener un encuentro serio con Dios, date tiempo y verás resultados.

Nancy Vélez dijo...

"La Vida Luego del Divorcio a los 23 Años"
Parte: I – Piloto

Hola, Félix:

Me hiciste recordar la situación que vivió mi hermana con mi cuñado. Se hicieron novios y de inmediato lo llevó a casa para evitar los comentarios de la gente. Se cuidaba de hacer las cosas bien. Viene a mi memoria cuando mi madre le expresó lo siguiente: “ese muchacho no te conviene, podrá ser cristiano, pero no le tengo confianza…hay algo en él que no me agrada”. Se casaron y todo marchaba bien. Ella siempre vio luces por él. Fue su primer novio. Nos criaron con valores cristianos y nos restringían las salidas. Siempre nos pasábamos en casa. Él siempre se veía muy atento con ella.

Hubo un detalle en una de las visitas en que nos encontrábamos compartiendo en el hogar de mis padres, claro ya me encontraba casada y fue una broma en que la humilló, yo lo tomé de esa manera, y créeme dije para mi misma “esa es una broma pesada y fuera de lugar”. Le dije a mi esposo “cómo es posible que él se exprese de esa manera, ni jugando le acepto una broma como ésta”.

Pasaron los años y una mañana llegó a mi casa. Sorprendida, porque ella vivía en Bayamón, y era inusual que viajara un día en semana a mi hogar. Llorando amargamente me expresó que no era feliz con Roberto (su esposo). Te imaginarás cuán asombroso fue para mí. Me expresó que se iba a divorciar, no le creía…traté de persuadirla y que le brindase una oportunidad, pero todo fue inútil. Se divorciaron, no tenían niños. Algo similar a tu caso. Trató de rehacer su vida, me refiero a continuar trabajando, pero él le suplicó que era la única persona que amaba…en fin, se casaron nuevamente. Procrearon tres hijos y todo marchó bien.

Ella enfermó, y le sacaron unas masas en las cuales dio positiva al cáncer. Se le pasó al hígado y de tres meses que le daban de vida, duró tres años y murió. Era la más pequeña de cinco hermanos. Permíteme decirte, que mi hermano Junior murió en junio y lo enterraron en el aniversario de mi boda, y mi hermana, en ese mismo año ya finalizando el año, en plena despedida de año me dejó. Me siento triste porque siento que parte mía se fue con ella. La añoro grandemente.

¿Por qué comparto esto contigo? Mi mamá nunca se equivocó, pero mi hermana no supo escucharla. Roberto se casó después de los tres años y tiene problemas. Creo que no encontrará en este mundo a alguien que lo soporte como lo hizo mi hermana, que en paz descanse. Él está consciente de esta realidad.

Continuará…

Por: Nancy Vélez

Naty dijo...

Felix:

Nosotros como seres humanos muchas veces cuando creemos a ciegas en una personas es muy difícil hacerle caso a la persona que ve de afuera y se da cuenta de lo negativo de la relación. Es triste uno confiar en una persona para que luego te traicionen.

Cuando uno es joven es donde más uno tiende a cometer tantos errores. Pero como dices por ahi el ayer ya se fue de tus manos, vive el presente minuto a minuto. Yo voy para seis anos con mi novio y todavía no me he casado. Tenía planeado para estas navidades pero estoy un poco insegura y frustrada porque no hay una estabilidad económica y no quiero casarme ya que la mayoría de los divorcios son por problemas económicos.

Mucha gente nos ve y nos pregunta que ya es hora de casarnos y aunque mi novio quiere les digo que no quiero casarme para luego divorciarme. Es por esto que debemos de analizar las cosas antes de hacerlas y arrepentirnos porque aunque el que se arriesga no gana pero es mejor prevenir que tener que remediar.

Sigue adelante que la Dios te tendrá algo bueno para ti y como siempre digo ten Fe que la Fe mueve montanas y es lo último que se pierde en esta vida.

Maggie dijo...

Creo que siempre hay que mirar al pasado, para aprender del pasado, no para repetirlo. El pasado nos puede enseñar mucho, pero no estamos marcados por él. No hay que entender el pasado como una marca indeleble, que justifica los hechos, sino como una enseñanza que te hace a ti corregir y enderezar el cauce, para ver hacia dónde quieres ir
En lugar de pelear sobre lo que pasó, lo que no pasó, lo que hay que ver es por qué nos torcimos, en qué momento empezó. En este momento estamos diciendo que sí, que todo lo que pasó atrás está todo mal, pero por otro lado repetimos la historia.
Pues no nos sirve de nada decir que lo que pasó está mal, si estamos volviendo a hacer lo mismo que hicieron los otros, con variantes a veces peores... como si todo lo que paso no sirviera para nada y hubiera que hacer borrón y cuenta.
Vivamos el presente de las experiencias pasadas, pero no como las experiencias, lo pasado es pasado.

Carmenjoan.blogspot.com dijo...

Hola: Felix

LA VIDA DEL DIVORCIO A LOS 23 AÑOS
PARTE I: PILOTO

Luego de haber leído tú ensayo pienso que no estabas preparado para tomar una decisión tan importante para tu vida. Cuando se es muy joven creemos que lo sabemos todo, pero no es así. Lamentablemente le hacemos caso omiso a nuestra familia o a las personas que verdaderamente nos quieren. Considero que cada persona es un mundo diferente y que cada uno de nosotros obtiene en la vida lo que cosecha. A veces las personas se ponen entre ceja y ceja cosas que no les convienen pero a toda costa desean conseguirla y no siempre es lo mas grandioso del mundo; es por eso que se tropiezan y gracias a no seguir consejos.

Según lo que escribiste puedo darme cuenta que tu relación era tan inestable que jamás podía llegar algún lugar. Para un matrimonio joven no son buenas tantas separaciones. Cuando se comienza una relación y se nota que por alguna circunstancia algo esta fallando se debe buscar ayuda inmediatamente ya sea psicológica o espiritual. El tener a Dios como centro del hogar, de las decisiones que se tomaran y de todo nuestro camino sin lugar a duda todo será mucho más fácil. Pero cuando no le damos ese lugar a Dios todo retrocede de una forma significativa ya que se pierde el respeto, comienzan el tira y jala y sobretodo el amor se desvanece.

Mi recomendación para una próxima relación encamina tu vida y la de tu pareja hacer las cosas como Dios nos dice que las hagamos. Comienza con el pie derecho, haciendo todo paso a paso para que no te vuelvas a tropear. Imponte respetar a esa persona en todo el sentido de la palabra ya que según tu respetes a la persona que tienes a tu lado así te respetaran. A veces no nos gusta que nos hagan unas algo, pero tendemos hacer lo mismo o peor. Trata a tu pareja como un tesoro entregado por Dios para que sea tu ayuda idónea y ambos puedan ser bendecidos. Dios entrara a tu vida solo cuando tu le des el permiso de hacerlo porque el respeta las decisiones nuestras y no entra sin autorización. Busca su rostro y el te revelara cosas muy buenas para tu vida y si todavía no tienes la persona que Dios quiere para tu vida el tendrá el control para entregarte lo mejor pero debes merecerlo. Dios es justo y solo obtendrás lo que te ganes.
Por: Carmen Joan

gloria_sentimientos dijo...

La vida después del divorcio

Ha medida que va pasando el tiempo nos enfrentamos a nuevas situaciones. Las cuales nos provocan en muchas ocasiones, angustia, pena, intranquilidad. Pero es necesario tener las fuerzas para vencer las mismas.
En la vida hay que ser valiente para poder vencer todos los obstáculos que
Encontramos en nuestro camino. Cada obstáculo o fracaso que tenemos nos provee una lección. Nos prepara para convertirnos en mejores seres humanos. Somos más sensibles, responsables, bondadosos. Aprendemos a entender las situaciones que tienen los demás. En este mundo hay muchas personas que están en peor condición que nosotros. Solo hay que mirar al lado y vamos a ver lo que sufren los demás. Es por eso que debes pedir a Dios Todopoderoso, fortaleza, que ilumine tu mente, tu camino. Que todo lo que haya sucedido en tu vida sea para crecer mental, emocional y espiritualmente. No dejes que las cosas que te hayan pasado destruyan tus ilusiones, tus metas. Sigue adelante. Los “fracasos” no son castigos son herramientas que nos ayudan a fortalecernos para poder seguir luchando. El mundo tiene muchos cambios y tenemos que estar pendiente de ellos. Enfréntate a cada nueva situación. Ora mucho, ten mucha comunicación con Dios. Ėl sabe en que lugar te corresponde estar y para que. Es solo cuestión de la Fe que tengas. A medida que vaya pasando el tiempo vas a poder entender el por que de las cosas pero es cuestión de no desesperarse por que esto traería graves consecuencias. La vida, el triunfo es de los que saben enfrentarse a cada reto. No dejes que ningún obstáculo te impida progresar y alcanzar tus metas. Hay un mundo por delante la cual debes disfrutar al máximo. Ya llegaran otros momentos para enamorarte, formar un hogar y una familia. Ten Fe, todo llega en su momento. No es correcto apresurarse ni desesperarse por que no vas a disfrutar cada momento en la vida.
Saboréate sorbo a sorbo todo minuto comparte, ayuda, ora, trabaja, estudia haz todo lo que realmente puedes hacer, aprovecha tus fuerzas, energía, tu vida, tu salud, tu juventud. La vida es bella y es solo una disfrútala sin excederte, todo tiene un limite.